martes, 25 de junio de 2013

[Carrusel Bloguero] Nuestro alicaído ambiente bloguero

Volvemos brevemente al redil para participar en el Carrusel Bloguero de este mes.

Aunque ya muchos conocen el formato tenemos que recordarlo de nuevo... las instrucciones para participar en el Carrusel pueden encontrarse aquí.


Este mes la entrada anfitriona pertenece al blog Next Stop!, hablando de algo que, queramos o no, a los que tenemos o seguimos blogs nos toca muy de cerca: los propios blogs y el ambiente rolero de la red.

Comenta la autora del artículo que el ambiente que se respira últimamente en la "escena local" de blogs roleros le parece que ha cambiado respecto de cómo era antes, y lo cierto es que estoy de acuerdo con ella, aunque quizá no por los mismos motivos.

Creo que llevo apenas unos dos años siguiendo la marea de artículos de una de mis aficiones preferidas y participando en las redes sociales que se han construido alrededor de sus autores, y es verdad que ya se nota cierto cansancio generalizado, cuando no directamente abandono. Muchos blogs han cesado el ritmo de publicación casi por completo o han reducido su actividad a hacerse breves ecos de las noticias que sacuden el mundillo, como promociones de editoriales o nuevos lanzamientos, creando efectivamente poco contenido. Blogs que seguía bastante de cerca como por ejemplo Rol en el Castillo no publican nada desde hace unos meses, y demonios, hasta +Lord Tzimize y +Athal Bert , dos de los autores con blogs más prolíficos que sigo, han dicho que van a tomarse un descanso.

Así sienten sus escritorios muchos roleros con blog.
Yo tampoco estoy libre de esto, quizá más incluso que los arriba mencionados, ya que mi última entrada es de Marzo de este año y las anteriores tampoco pasaban de participar en el Carrusel de cada mes.

¿Por qué sucede esto a cada blog concreto? Bueno, lo cierto es que no lo sé y, sin ánimo de resultar brusco, no creo que me incumban los motivos que tiene cada uno para dar a su blog mayor o menor importancia o continuidad. Es decir, creo que es más interesante elucubrar sobre el por qué de la tendencia generalizada.

Probablemente uno de los motivos principales sea el que expone Beelzenef, el de la variedad de contenidos. Con la marea de información de la que cualquier afición dispone en la actualidad gracias a internet, a veces puede hacerse frustrante el querer escribir algo pero encontrarte con que cualquier cosa que se te ocurre ya ha sido más que tratada en varios sitios, más incluso si contamos los lugares en otros idiomas como puede ser, sobre todo, el inglés. Tal vez seguimos queriendo escribir, pero no queremos caer en eso de hacernos eco y opinión de toda noticia o reseñar tal o cual libro de forma sistemática (al margen de que, en realidad, muchos blogs que siguen ese patrón de publicaciones también estén decayendo). ¿Por qué no hacemos algo nuevo tal y como propone Beelzenef? ¿Tal vez el recibir tanta información nos haya dado la falsa impresión de que "ya todo está inventado/analizado/tratado/explorado" y por ello se ha cuadriculado nuestra capacidad creativa en una suerte de "si no lo he visto ya en otro sitio es que no existe/no es posible"? Es de las cosas que más se me pasa por la cabeza últimamente no solo en el ámbito del rol, sino en muchos otros. Cuanto más tienes donde elegir, más indeciso y limitado te ves. Basta con tener un mp3 con gigas y gigas de música para que te pegues una eternidad explorando los temas en el modo aleatorio, en busca de uno que te apetezca escuchar de verdad en ese momento. Es como si estuviéramos buscando desesperadamente la forma definitiva de hacer algo, la indudablemente mejor y superior, sin percatarnos del tiempo que estamos perdiendo en el proceso. Y todo ello en lugar de pasar de todo y, simplemente, escribir algo que te apetezca y como te apetezca.

Siguiendo la línea que trata la entrada anfitriona, con cuya reflexión en el último apartado estoy bastante de acuerdo y que quiero desarrollar un poco más, creo que el hecho de que ahora al escribir cada entrada la promocionemos automáticamente en cada una de nuestras redes sociales, hubs de feeds, etc también tiene parte de culpa. Es como si nos viéramos obligados a homogeneizar, sistematizar y mecanizar lo más posible el formato de nuestro rinconcito de escribir, pues en nuestro fuero interno sabemos que al estar este conectado y reconectado a nuestros perfiles de Google+, Facebook, Twitter y otros, con él estamos construyendo y reafirmando nuestra "personalidad en internet". Ahora explorando un poco podemos ver la cara, los amigos y las conversaciones de los autores de los blogs con sus amigos "de la vida real" en internet entre otras muchas cosas, los propios autores sabemos esto y al haber conectado todos nuestros perfiles y sitios, ya sea con este mismo propósito o por comodidad y automatización, queramos o no, hemos sido sensiblemente condicionados. Quizá cuando todas estas redes y sistemas no eran tan populares, cuando no se nos insistía tanto en poner nuestro nombre real en la red, pudiendo usar algún sobrenombre molón y cojonudo desde la que soltar nuestra verborrea para que la encontrara cualquier persona al meterse en un buscador y no en nuestro perfil único de internet, toda esa parafernalia de mostrar la personalidad nos importaba un carajo.

De todas formas y aunque yo mismo esté afectado por esta tendencia intento que no todo esto me afecte. Sigo creyendo que un blog personal, de los que he tratado en este artículo, es para lo que quiera cada uno y ninguna circunstancia que te llevara a querer crearlo inicialmente, sea el querer colaborar en "la escena rolera", sea querer que te lean algunas personas, sea lo que sea, debería exigir a sus autores a escribir o a mantener un ritmo según unas directrices que, dicho sea de paso, tampoco es que estén escritas en ningún sitio, aunque estos así se lo propusieran en un principio. En mi caso, ¿Que traduzco algo que me interesa para mi propia partida aunque no cuadre con la temática del blog? Pues perfecto, ni siquiera tenía pensada una temática más concreta que "rol". ¿Que ahora quiero hablar de música que he descubierto y pega para las partidas, aunque no haya hablado de música hasta ahora? Pues también, ¿Que me olvido del blog y paso un kilo de escribir en tres, cuatro, los meses que sean? Pues oye, también, y no estoy obligado ni a avisar de mi "ida" ni a anunciar mi vuelta como si fuera una institución. Es decir, si el blog es tuyo y de nadie más puedes cambiar la temática, el ritmo, lo que sea sin avisar ni dar explicaciones.

Sacudiéndonos estas convenciones y obligaciones inconscientes a las que hemos llegado y dejando de comparar y construirnos la identidad cuidadosamente con cada aportación quizá acabemos por revitalizar el ambiente rolero sin siquiera darnos cuenta. Creo que el secreto está justamente ahí, en dejar de pensar en el todo y centrarse en lo que a cada uno le apetece.

¡Hasta la próxima!